lunes, 17 de noviembre de 2008

La memoria Histórica

Nunca me ha gustado el concepto de memoria histórica y menos si se aplica a una ley. Por propia definición, la memoria siempre es histórica, pues se basa en la retención de hechos o experiencias pasadas. Y en esencia nunca es universal. Al contrario, la memoria es íntima, personal y en la mayoría de los casos intransferible a terceros -hijos, conyuges, hermanos, amigos...- que solo retendrán de nuestra memoria aquello que les interese. Porque la memoria, aun cuando se nutre de hechos comunes, los escoge de forma selectiva y los analiza subjetivamente en función del impacto emocional, cultural o ideológico que supone para cada persona.

El nieto de una víctima de Paracuellos tendrá una memoria histórica muy diferente a la de aquel a cuyo padre fusilaron en Málaga o Badajoz. E igual de pertinaz. Eso no hay ley que lo cambie. Como decía Manuel Vázquez Montalbán en su novela “El estrangulador”
Sin memoria no existimos, yo al menos no consigo existir. En mi memoria se cumplen mis deseos y cuando tengo deseos quiero que cuanto antes se conviertan en memoria para que nadie me los frustre, ni me los quite, ni me los convierta en deseos convencionales.


Sólo podemos hablar de memoria colectiva si la entendemos como la agrupación de sentimientos comunes, aun siendo heterogéneos, ante hechos concretos. Y como no existe ningún acontecimiento que haya generado jamás una adhesión o rechazo universal, al estudiar un período histórico nunca hallamos una memoria colectiva, sino varias.

Por tanto, para abordar el franquismo, por encima de la memoria, convendría apoyarse en principios universales como la justicia y los derechos humanos.

Y es que aunque la guerra supuso horror en ambos bandos, el hecho incuestionable es que el núcleo de aquel terror fue el levantamiento en armas de unos militares sediciosos, apoyados por una parte de la población, contra un gobierno legítimo. Que ese alzamiento provocó una cruenta guerra civil que ganaron los rebeldes instaurando una dictadura durante casi cuarenta años.

Reconocer hechos tan elementales no implica ni idealizar a la segunda república ni tildar de asesino o cómplice a toda persona que participara en el régimen franquista. Significa asumir nuestro pasado sin traicionar la memoria de nadie.

Sin embargo, la derecha, el clero y buena parte del poder judicial siguen defendiendo a día de hoy la amnesia como única receta para encarar este período. Una amnesia selectiva, que celebra la beatificación de los curas asesinados en la guerra civil mientras miles de personas aun no saben donde reposan los restos de sus familiares represaliados.

El resultado es que 33 años después de la muerte del dictador, la memoria histórica de los vencedores sigue imponiéndose sobre la de los vencidos. Mientras se mantenga esta situación, será imposible cerrar este funesto capítulo de nuestra historia.

martes, 11 de noviembre de 2008

Sarah Palin y un Dios algo despistado

La gobernadora de Alaska y excandidata a la vicepresidencia de los Estados Unidos Sarah Palin no tira la toalla tras su derrota y afirma que Dios le enseñará el camino hacia la Casa Blanca.

Extraña esta visión del Creador, reducido a la categoría de navegador GPS, pero aun sorprenden más las declaraciones de Sarah Palin acerca de la polémica sobre su desconocimiento de África:


"Yo nunca, nunca hablé sobre si (África) es un país o un continente; simplemente no sé de este asunto”.


Así que la que pretende regir los designios de la nación más poderosa del mundo de la mano del Altísimo, "simplemente" no sabe qué es África.

Sin embargo, la gobernadora de Alaska, en su incultura, es muy coherente.

Sarah Palin reconoce estar guiada por Dios. Y su buen Dios hace ya mucho tiempo que se olvidó de África

viernes, 7 de noviembre de 2008

Camarada Emilio Botín o el nuevo socialismo

El periódico “The Times” equipara a Carlos Marx y Emilio Botín en su lista de los 10 “houdinis” triunfadores de la crisis financiera mundial .

¡Joder, no me extraña que en Izquierda Unida tengan problemas de identidad!

A ver, uno ya tenía la impresión de vivir bajo la dictadura bancaria, una especie de soviet supremo que rige nuestros destinos y que se encarga de demostrarnos su omnímodo poder con amenazadoras cartas en el que las predomina el revolucionario color rojo de nuestros extractos. Misivas que nos recuerdan cuan miserables somos y, sobre, todo, cuanto debemos a nuestros próceres.

Tambien tengo a las sucursales bancarias por una especie de checas, a las que te acercas obligado por las circunstancias y de las que siempre sales más torturado que cuando entraste, tras enfrentarse al comisariado que las rige.

Pero han tenido que ser los ingleses quienes sacudan nuestras dormidas conciencias para demostrarnos que vivimos en un régimen marxista. Y que nuestro líder es el camarada Emilio Botín-Sanz de Sautuola García de los Ríos, marqués consorte de O'Shea, hijo, nieto y biznieto de banqueros. ¡Salud al padre de la patria!

Claro que en esta carrera hacia la lucha final que relata The Times, Don Emilio camina junto a personajes tan peculiares como Ronald MacDonald, el payaso de las hamburguesas proletarias, o Reckitt Benckirser, dueño entre otras marcas del célebre Harpic. Lógico. Con tanta gente floja de esfínteres -por cabreo, por miedo o por las jodidas hamburguesas- los inodoros deben sufrir un enorme desgaste.

miércoles, 5 de noviembre de 2008

Mal día para Aznar

Barack Obama barre a John McCain en las elecciones a la presidencia de los Estados unidos y será el sucesor de Georges Bush en la Casa Blanca.

Créanme que me alegro.

Me alegro porque Obama es negro y mi hija es china. Su elección pulveriza muchos tópicos sobre las sutiles diferencias, aun revestidas de condescendencia, que los ciudadanos de un país occidental establecen sobre sus minoría raciales. Y como ya saben aquello de que “antes habrá un presidente negro en Estados Unidos que uno catalán en España” nada impide ya a mi niña, catalana y de rasgos marcadamente orientales, lanzarse a la carrera por la Moncloa, si es lo que decide. Torres mas altas han caído.

Me alegro tambien porque, sea quien sea el que lidere aquel inmenso país norteamericano, seguro que lo hará mejor que Georges Bush, el peor presidente en la historia de Estados Unidos. Sus desastres en la guerra, en política exterior y medioambiental, su habilidad para hundir a la economía mundial y la capacidad que ha demostrado para destrozar a su propio partido, lo acreditan para tal título.

Una nada honrosa nominación en la que están de acuerdo demócratas, republicanos y buena parte de los habitantes de este mundo globalizado.

No todos, desde luego. Hoy será un mal día -y de ello también me alegro- para José María Aznar, el último neocón.

aznar neocon

martes, 4 de noviembre de 2008

Muchas gracias

¿Qué más puedo decirles?

Pues que la intervención ha ido perfecta y que a las 8:30 abandonaba la clínica por mi propio pie y a paso ligero. De hecho, el único padecimiento que aun sufro se lo debo a mi compromiso con ustedes y a ser tan bocazas.

¿El motivo? Me ha tocado pasar este trance con “sola” de Curri Valenzuela como libro de cabecera. Hasta los médicos se acojonaron al ver el ejemplar en mi mesita.

Lo dicho, muchísimas gracias a todas y a todos.

lunes, 3 de noviembre de 2008

El fin de la agonía. (la ablación II)

En el día de hoy, a las 5 de la tarde y si el tiempo no lo impide, quien esto suscribe volverá a estirarse en el quirófano, para ser sometido a una nueva ablación.

.Durante este último mes y medio no he sido muy sincero con ustedes. Ahora les puedo confesar que tras la operación, las arritimas, lejos de remitir, se han reproducido de forma brutal. En estos 45 días habré padecido unas 20, cuando antes de la intervención mi media era de 2 o 3 al año.

Ha sido un mes y medio de trastornos, de buscar a alguien que cuidara a la peque a las 4 y media de la mañana mientras mi mujer y yo salíamos pitando al hospital, a veces en ambulancia. Tiempo de anular citas hasta casi atreverme a salir, de trabajar un día sí y dos no, y sobre todo de vivir con la angustia de no saber si esta mierda de vida era el futuro que me esperaba.

Lo jodido es que decidí someterme a la primera intervención por propia voluntad, consciente de que el índice de éxito era del 70% pero con la seguridad de que si las arritmias no remitían, no quedaría peor de lo que estaba.

Por eso no entendía nada.

Pues bien, tras someterme a diferentes pruebas, el increíble resultado es que LA OPERACIÓN FUE UN ÉXITO.

Ocurre que las arritmias que ahora padezco nada tienen que ver con la intervención. Proceden de la zona ventricular –las anteriores eran auriculares- se manifiestan de forma distinta –son más taquicardias que arritmias- y requieren otro tratamiento.
La buena noticia es que son mucho más sencillas de erradicar. La intervención dura unos 20 minutos y los médicos garantizan el éxito al 100%.

Con la esperanza olvidarme de una puta vez de este calvario, el martes día 4, o el 5 a lo sumo espero estar de nuevo con ustedes. No pueden imaginar la compañía que me han hecho durante este mes y medio. Un calor que ha compensado con creces que a veces no pudiera responder a tiempo a sus comentarios o que tuviera que dejar alguna entrada a medias para echar a correr al cardiólogo. Y disculpen que durante este tiempo haya evitado darles la brasa con tan engorroso asunto. “El siglo de las luces” no se creó para contar mis penas sino para reírnos un poco de la vida, alzándonos sobre sus miserias. Y a fe mía que así seguirá siendo.

Nos vemos. Besos y abrazos a todas y todos. Que cada cual escoja lo que prefiera.