El siglo de las luces acaba de recibir un premio thinking bloguer award por el conjunto de su obra. El galardón, en contra de lo que cabría pensar, no ha sido otorgado por Lycos como acto de desagravio, sino por mi buen amigo Javier, de Moscas en la Sopa.Lo cierto es que me ha hecho mucha ilusión. En primer lugar porque esta distinción se otorga a páginas cuyo contenido mueve a la reflexión. Y en segundo lugar porque, tras el cambio de dominio, agradezco de forma especial que me den ánimos. El gráfico adjunto habla por sí solo. Pueden ampliarlo haclendo click en él.

Crean que
cuando sucedió esta desgracia estuve a punto de aparcar “el Siglo de las Luces”.Y no por desánimo. Verán, tras casi un año de preparación
estoy en condiciones de embarcarme en mi segunda novela. La primera ni se publicó pero ahora… ¡es la hostia, seguro que me jubila!
El problema es que necesitaré un tiempo que no puedo robar ni a mi trabajo ni a mi familia, a la que ya le quito más del quisiera. ¿De donde lo saco pues? Me resisto a desatender “el siglo de las luces”.
Lo crean o no, le he cogido mucho cariño a este blog, y también a ustedes. Me encanta escribir, responder comentarios, actualizarlo, tenerlo limpito, y en definitiva cuidar de él.
Como un Tamagochi, vamos.
Este verano pensaré cómo combinar ambas actividades. Les quiero mucho pero
tampoco estaría bien privar al mundo de la genial obra de arte que llevo en mi cabeza -¡toma ya modestia!-.
Para acabar, dado que este premio es algo así como un meme,
distingo con tal galardón a estos cinco autores de blog:
Mercé, porque su blog sí hace pensar y despierta mi lado más intelectual.
Javier Úbeda, porque me recuerda que no todo es política y despierta mi lado más friki.
Arístides porque su blog, tan combagtivo como honesto, es un premio a la constancia.
Baba O,Riley por su facilidad para buscar puntos de encuentro desde su página.
Armando, porque su página es buenísima y además
sé que detesta los memes, a los que considera la mayor prueba de egocentrismo de la blogosfera. Y no le falta razón pero… ¡Que coño!
Dejo fuera a mucha gente, lo se. Por ejemplo, a
Manuman no se lo doy por “perro” y a
Germán porque tengo que empezar a poner zancadillas a otros escritores como parte de mi iniciación en el mundillo literario, aunque ambos lo merecen.
[tags] thinking bloguer award,Lycos,premio[/tags]